Redován cuenta ya con su primer parque canino. Una instalación de 1.200 metros cuadrados puesta en marcha por el Ayuntamiento con la colaboración de la Asociación Ecovida, encargada de los contenedores de ropa usada en el municipio. El concejal de Medio Ambiente, Ramón López Escarabajal, ha destacado el hecho de que los juegos instalados en este parque para los animales están realizados íntegramente a base de productos reciclados, “con lo que demás de posibilitar este espacio de esparcimiento para las mascotas, colaboramos en la protección de nuestro entorno”, y ha añadido que los han elaborado personas en exclusión social. Al margen de los juegos, este espacio se ha dotado de bancos, y se han señalizado los caminos para pasear.
El parque se ubica en la zona verde mediante la que se accede al cementerio de Redován, y la alcaldesa, Nely Ruiz, ha asegurado que “era una instalación muy demandada en nuestro municipio que sabemos que va a ser muy utilizada, ya que desde que comenzó la obra son muchas las personas que nos han preguntado que cuándo se abría”. Ruiz ha resaltado igualmente el hecho de que se hayan empleado materiales reciclados para la construcción de los juegos y ha recordado que nuestra sociedad “tiene que tener en cuenta ya la economía circular en cualquier actuación, y por tanto, somos las administraciones locales las que debemos dar ejemplo a la hora de reducir, reciclar y reutilizar los residuos que se generan, como se ha hecho en este caso”.
El parque cuenta con una valla de salto, una pasarela para que los perros puedan recorrerla, un balancín, un túnel y una zona eslalon, “y tiene unas normas de uso que son de obligado cumplimiento para quienes traigan a sus perros”, ha indicado el concejal de Medio Ambiente. Ramón López ha especificado que los dueños son responsables de las conductas de sus animales y que en todo momento deben tenerlos a la vista y al alcance de su voz. Al mismo tiempo, los perros de razas potencialmente peligrosas deben ir siempre con bozal y en ningún caso ir solo con menores. También se debe impedir que los perros amenacen o ataquen a otras personas o animales. Respecto a las vacunas, deberán estar actualizadas, y no pueden sufrir ninguna enfermedad contagiosa para acceder al recinto, donde han de entrar y salir con correa. Los excrementos, como en cualquier otro espacio público, deberán ser retirados por los dueños.
La instalación cuenta además con una fuente de agua, dos bancos, una mesa para pícnic y un dispensador de bolsas para las deposiciones de los animales. El parque va a estar abierto a los usuarios todo el día “y desde el Ayuntamiento lo que pedimos a quienes vengan, es que cumplan las normas y nos ayuden a mantenerlo en perfecto estado para poder disfrutarlo durante mucho tiempo”, ha concluido el concejal.